Autonomía de la mujer en el embarazo y maternidad
- Rama Tronco
- 27 ene 2019
- 3 Min. de lectura
El periodo de embarazo de una mujer y la maternidad son procesos comunitarios. Desde que se recibe y comparte la noticia, se disfruta con los círculos cercanos. Es un momento de profundos cambios no solo para la madre, sino también para quienes la rodean. Es por esto que en esta etapa, me parece relevante la comunicación, el aprendizaje y el respeto mutuo. Escribo esto tanto para la mujer que la enfrenta como para quienes la rodean.
Este proceso nos confronta a las mujeres ante lo imperioso que es el conocerse a una misma, nuestros límites y espacio. Y no solo eso, sino que comenzar a profundizar dicho conocimiento, ya que el cuerpo y la vida propia esta mutando. Para mi, en lo personal, también implica conjugarlo con el de mi pareja/compañero, porque hemos decidido vivirlo juntos. Y, desde aquí, compartir, aunque también establecer límites, con los cercanos.
Es por esto que toco el tema de la autonomía de nosotras como mujeres en este proceso tan importante: creo que cada una decide vivirlo de la forma que le parece más conveniente, de acuerdo a su historia y manera de ver la vida. Cabe recordar que en general la sociedad cuestiona constantemente nuestra autonomía, y me parece que es algo que se vuelve aún más visible en el embarazo. De todas formas, yo he decidido que en mi vida seré constructiva cada vez que comunique, e intentaré aportar a transmutar o transformar lo que creo que podría mejorar, por lo que escribir esto para mi tiene un carácter pedagógico. Además, aunque me parece que la autonomía es vital, también lo es la retroalimentación, sobretodo con quienes tienen mayor experiencia.
A) Nuestro cuerpo: En el embarazo tanto el cuerpo femenino como lo que se percibe de él cambian. Como ahora hay una vida que se esta gestando, muchos quienes quieren interactuar con el futuro bebé a través del contacto con la madre. Por ejemplo, es muy común el que algunos tocan o acarician el vientre por este motivo, sin consultar previamente. Aunque es comprensible, es de suma importancia pedir permiso antes de traspasar estos límites, porque mientras a algunas les puede acomodar, hay otras a las que no. Cabe recordar que somos personas que deciden los límites sobre nuestro cuerpo.

También hay otros ejemplos comunes, como las sugerencias alimenticias, de prevención de enfermedades, etc; sobretodo para aquellas madres que tenemos un tipo de alimentación diferente. Si bien podemos requerir esa información, solo debe ser dada en caso de que sea solicitada, o se este en necesidad de ella. Cada mujer tiene una decisión propia en este tema que merece respeto, y , que ante duda o dificultad, sabrá con quien consultar.
B) Aconsejar : Ya que el embarazo y/o la maternidad es un proceso nuevo en muchas ocasiones, es lógico que habrá muchísimas cosas que aprender al respecto de algunos quienes ya han atravesado dicha experiencia. No es bueno cerrar el espacio para el diálogo y transmisión de conocimiento. Sin embargo, también hay que cuidar la pertinencia de los consejos, manteniendo en mente el concepto de autonomía y elección de estilo de vida de cada mujer. En lo personal, quisiera recibirlos cuando los pido y de algunas personas, no de todos quienes quieran opinar sobre el tema.
C) Proyectar experiencias: Este tema me parece uno de los más delicados, ya que muchas veces es de carácter inconsciente en las personas. Esto ocurre cuando alguien que vive una experiencia frente a un hecho, cree que otra persona que se enfrenta a una situación similar, obtendrá los mismos resultados. Por ejemplo: una tía que tuvo complicaciones en su parto advierte del peligro a la embarazada cuando su fecha se aproxima. Es aún más delicado cuando se proyectan situaciones negativas, miedos, rabias, etc, porque es la madre y el futuro bebé quienes absorben esa energía. Cuidemos de aportar buenos pensamientos, deseos o energía, pues no todas las experiencias son iguales, ni siquiera en situaciones que se parecen. También esto incluye la crianza, donde es aún más común proyectar o querer proporcionar métodos que se piensan provechosos.








































Comentarios